Cuando nació José, trajo alegría a la vida de sus padres.
Aunque estaban muy emocionados de traer a su pequeño a casa, también estaban asustados de enfrentar un futuro desconocido.
A los pocos días de nacer, José dejó de comer y estaba perdiendo el peso. José estaba luchando con todo lo que tenía, pero nada mejoró.
Mientras más días pasaban, más miedo tenían sus padres. Entonces, llevaron a su bebé al médico local, quien más tarde le confirmó lo que más temían: José tenía cáncer de cerebro.
Cuando José se volvió suficientemente fuerte, sus médicos locales realizaron una cirugía para extirpar la masa en su cerebro, y lo refirieron a St. Jude Children’s Research Hospital.
Las familias, como la de José, nunca recibirán una factura de St. Jude por tratamiento, transporte, hospedaje ni alimentación.
En agosto 2020, la familia de José llegó a St. Jude, donde los médicos crearon un plan especial para tratar de salvarle la vida.
Estoy muy agradecida que St. Jude nos haya dado todo lo que necesitamos. No tenemos que preocuparnos por facturas. No sabía que St. Jude nos iba a ayudar tanto.
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