Avyan tiene cosas de un 'alma vieja'. Aunque él es introvertido y tranquilo, demuestra tener una gran confianza y fortaleza consigo mismo, que van mucho más allá de su edad.
Su madurez y optimismo le han dado las fuerzas a su familia para caminar por lo inimaginable.
Todo comenzó con dolores de estómago y vómitos. Lo que al principio parecía ser un simple virus infantil, comenzó a preocupar a los padres de Avyan cuando no se curaba.
Llevaron a Avyan a ser evaluado por su pediatra local, quien ordenó pruebas que incluían una tomografía computarizada de su cerebro.
Ni Avyan ni sus padres estaban esperando lo que pasó después, les confirmaron que tenía un tumor canceroso en el cerebro.
Afortunadamente, Avyan y su familia fueron referidas a St. Jude, donde los doctores le diseñaron un tratamiento que incluía quimioterapia y una terapia especial de radiación.
Las familias, como la de Avyan, nunca recibirán una factura de St. Jude por tratamiento, transporte, hospedaje ni alimentación.
Avyan ya terminó su tratamiento y regresó a casa. Le gusta aprender sobre el espacio y pasar tiempo con el perro de la familia, Astro.
No descansaremos hasta que ningún niño muera de cáncer. La búsqueda de curas debe continuar para niños como Avyan.
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