Alana tiene muchos sueños para el futuro — ser maestra, abogada, bailarina y científica.
Pero esos sueños se vieron amenazados cuando una resonancia magnética reveló la existencia de un cáncer.
Alana tiene linfoma de Hodgkin.
Ella fue referida inmediatamente a St. Jude Children’s Research Hospital en Memphis, Tennessee.
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Cada vez que me pongo sentimental, ella me dice 'Mami, estoy bien, voy a estar bien’.
“Las burbujas y las sonrisas; los brincos y los bailes. Así ha sido todo el camino que hemos recorrido", dice su mamá.
Alana también formó parte del Programa de Transición Oncológica, el cual está diseñado para ayudar a niños a ajustarse a la vida después del tratamiento.
Hoy, ella tiene más tiempo libre para estar afuera y se está concentrando nuevamente en las cosas que debe realizar para alcanzar sus sueños.
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