Los médicos saben que los pacientes a veces responden de formas muy diferentes al mismo fármaco. St. Jude Children’s Research Hospital es líder en estudiar cómo las diferencias en la conformación de los genes heredados de cada uno de los padres afectan la forma en que los pacientes reaccionan a determinados fármacos. St. Jude también es pionero en el uso de información para guiar la atención clínica.
Un equipo de investigación internacional dirigido por científicos de St. Jude ha descubierto que dichas diferencias heredadas pueden causar graves problemas durante el tratamiento de la leucemia.
Los científicos demostraron que los pacientes que heredan determinadas versiones de un gen llamado NUDT15 eran más sensibles a una importante familia de fármacos anticancerosos. Los fármacos, llamados tiopurinas, causan efectos secundarios graves en estos pacientes.
Los investigadores descubrieron que esto se debe a que estos pacientes eran menos capaces de descomponer estos fármacos. Esto a su vez aumentó el riesgo de que el fármaco se acumulara en los organismos de los pacientes.
Los resultados también ayudaron a explicar por qué los pacientes asiáticos e hispanos a menudo no toleran las tiopurinas en las dosis estándar. Los investigadores encontraron que las versiones de alto riesgo del gen son más frecuentes en personas de Asia y aquellas con ascendencia hispana.
“Los resultados sugieren que en el futuro podremos mejorar la seguridad y eficacia de la quimioterapia realizándole a los pacientes pruebas de detección para las versiones de alto riesgo del gen y mediante el uso de la información para ajustar la dosis del fármaco,” afirmó Jun J. Yang, PhD, del Departamento de Ciencias Farmacéuticas de St. Jude.
La investigación se publicó en la revista Nature Genetics.