Acerca de las infecciones del hongo Candida

Candida es un tipo de hongo que se haya habitualmente en el cuerpo de las personas saludables. La mayoría de los bebés adquieren Candida poco después de nacer. Pueden desarrollar una leve infección en la boca llamada “afta”que se ven como placas blancas en la lengua, paladar, y la parte interior de los cachetes. Generalmente el hongo Candida se mantiene bajo control por las bacterias buenas del cuerpo y por un sistema inmunitario saludable. Los pacientes con recuentos sanguíneos bajos tienen riesgo de sufrir una infección producida por el hongo Candida. Sus recuentos sanguíneos bajos pueden ser el resultado de su enfermedad o del tratamiento de la misma, como transplantes de célula madre y quimioterapia (drogas contra el cáncer). El uso de antibióticos puede también incrementar el riesgo de infección causada por el hongo Candida. Al matar tanto a las bacterias buenas como a las malas, los antibióticos pueden alterar el equilibrio natural del organismo de bacterias buenas, lo cual facilita el crecimiento del hongo Candida.

La mejor forma de prevenir infecciones es lavándose las manos, especialmente antes de manipular catéteres venosos centrales (vías intravenosas que han sido colocadas quirúrgicamente en el área del pecho). Es importante mantener limpia la piel, los tejidos bucales y el área donde se colocan pañales. Las erupciones y las llagas bucales pueden aumentar el riesgo de que su niño sufra infecciones producidas por el hongo Candida en la sangre y en otros órganos del cuerpo.

Una infección puede desarrollarse en casi todas las partes del cuerpo. El primer signo de infección grave producida por hongos es generalmente fiebre que no se va cuando el paciente toma antibióticos. El doctor de su niño comenzará un tratamiento con un medicamento antifúngico si es necesario.

Si tiene más preguntas sobre infecciones causadas por hongos, tenga a bien hablar con el doctor o la enfermera de su niño