De joven, Danny Thomas tuvo una meta en común. Entretener a su público y ser lo suficientemente exitoso para poder mantener a su esposa e hijos. Pero no fue fácil encontrar trabajo.
Inseguro de la dirección de su vida, Danny buscó guía en San Judas Tadeo, el santo patrono de las causas perdidas.
En ese entonces Danny le pidió ayuda a San Judas, “Muéstrame el camino en mi vida y te construiré un santuario”.
El éxito siguió a la plegaria de Danny, y muy pronto, el legendario artista se dedicó a cumplir su promesa a San Judas. El resultado fue St. Jude Children’s Research Hospital.
St. Jude abrió sus puertas en 1962.
Los tratamientos desarrollados en St. Jude han ayudado a incrementar la tasa de supervivencia del cáncer infantil de un 20% a más de un 80% desde su fundación hace más de 50 años. No descansaremos hasta que ningún niño muera de cáncer.
Durante esta época de Acción de Gracias, la familia Thomas sigue reflexionando sobre ese espíritu de la gratitud con este simple mensaje: “Agradece por la salud de los niños en tu vida, y ayuda a aquellos que no la tienen”.
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Durante esta época festiva, agradece por la salud de los niños en tu vida, y ayuda a aquellos que no la tienen.
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