Todo sucedió tan rápido.
Un día, la mamá de Myla recibió la llamada en el trabajo que su pequeña no se sentía bien. Lo siguiente que supieron fue que la llevaban de urgencia a St. Jude Children’s Research Hospital.
Myla, de cuatro años, tenía un tipo de cáncer de sangre llamado leucemia megacarioblástica aguda.
Sentí un golpe en el pecho.
Las familias, como la de Myla, nunca recibirán una factura de St. Jude por tratamiento, transporte, hospedaje ni alimentación.
En St. Jude, Myla recibió varios meses de quimioterapia, en un ambiente que su mama describe como acogedor, reconfortante y diligente.
Le encantaban la visita del perro, Huckleberry de St. Jude Paws at Play, y pintar con su especialista de vida infantil.
Podemos volver a encaminar su vida, sin tener que preocuparnos por nada.
Myla terminó recientemente su tratamiento en St. Jude.
“Ella es increíble” expresó Carmen. “Ella es tan fuerte”.