A los 3 años, Eri'Elle sabe lo que ama: los dinosaurios, su madre y St. Jude Children's Research Hospital.
Cuando Eri'Elle tenía sólo 2 años, empezó a tener problemas para ir al baño. Luego, no podía caminar ni sentir los pies.
La madre de Eri'Elle la llevó a su pediatra local e insistió en que le hicieran todas las pruebas necesarias para descubrir el origen de los síntomas de su hija.
Desafortunadamente, Eri'Elle estaba más enferma de lo que nadie se hubiese imaginado. Los resultados de sus pruebas indicaban que había un tumor que estaba rosando su columna vertebral.
Eri'Elle y su familia fueron referidos a St. Jude, donde su tratamiento incluyó quimioterapia, radioterapia y dos cirugías para extraer los tumores de su espalda y costillas.
A pesar de todo, Eri'Elle continuó sonriendo.
Las familias, como la de Eri'Elle, nunca recibirán una factura de St. Jude por tratamiento, transporte, hospedaje ni alimentación.
Su madre, Angel, dijo: "Estoy increíblemente agradecida por todo el mundo que trabaja en St. Jude. Yo tengo otros hijos y un hogar que cuidar. El hecho de que las personas en St. Jude pueden proveer tan buen servicio de forma gratuita es una bendición”.