Cada año, niños de todas las edades llegan a St. Jude para recibir tratamiento. Estos pacientes y sus familias se convierten en parte de la familia de St. Jude.
“Sabemos que los donantes dan con todo su corazón. Y podemos decirles que cada uno de esos dólares ayuda a estos niños … y están haciendo más de lo que probablemente se den cuenta.”
Francisco, papá de Christian
Es gracias a la generosidad de nuestros donantes que las familias nunca reciben una factura de St. Jude por su tratamiento, transporte, hospedaje ni alimentación. Por eso, queremos agradecerte.
De parte de nuestras familias, ¡Felices Fiestas!
Tu donación ayuda a asegurar que nuestras familias nunca reciban una factura de St. Jude por nada.
También te podría interesar: