Una combinación entre el amor hacia los niños de St. Jude, que heredó de su madre, la pasión por los Corvettes y el haber vencido el cáncer, llevó a Jesse Geiger a lo que él llama su segunda llamada (una segunda meta): Recaudar donaciones por St. Jude.
Geiger tiene 57 años de edad y comenzó con su iniciativa Corvettes 4 St. Jude en 2003, después de completar un tratamiento por sarcoma de Ewing —un cáncer de hueso predominantemente encontrado en niños de entre 10 y 20 años de edad. En 13 años desde la creación de Corvettes 4 St. Jude se ha logrado recaudar más de $1 millón a beneficio de St. Jude. Este logro ha sido posible con el apoyo de miembros de corvetteforum.com y a través de subastas en internet en las que se ofrecen accesorios de Corvettes, donados por dichos miembros, todo a beneficio de St. Jude.
Corvettes 4 St. Jude es parte de Cruisin for St. Jude, programa nacional de recaudación de fondos liderado por voluntarios y dirigido a los apasionados al mundo de los autos deportivos y el motociclismo. Sus miembros se reúnen para realizar viajes, shows y otras actividades para recaudar fondos por St. Jude.
Cada mes de octubre, Geiger, quien vive en Florida, junto con sus entusiastas amigos, también amantes de los Corvettes, manejan sus autos hasta St. Jude para hacer la entrega de un cheque con los fondos recaudados durante el año, que en 2015 alcanzó la cifra récord de $149,555. Durante el evento, los pacientes de St. Jude son invitados a subirse a los Corvettes y escuchar el rugir de sus motores.
“Esta es una de las partes más grandiosas”, dice Geiger, quien compró su primer Corvette en 1997. “No puedes describir el placer de ver a esos niños tener un descanso de sus tratamientos”.
Geiger dice que su madre era libanesa, al igual que el fundador de St. Jude, Danny Thomas. Ella fue una persona que apoyó a St. Jude durante mucho tiempo. Él siguió los pasos de su madre, donando a St. Jude a través de varios eventos de recaudación, antes de crear Corvettes 4 St. Jude. Geiger dice que aún conserva en su escritorio el cheque cancelado de una de las donaciones que su madre hizo a St. Jude.
Geiger trabajó en corporaciones de cumplimiento de la ley por más de 23 años, pero tuvo que retirarse después de someterse a tratamiento contra el cáncer.
“Cuando ya no pude seguir (trabajando), sentí como si Dios me hubiera dado esto como una segunda llamada” dice Geiger. “Mi plan es continuar recaudado fondos por St. Jude, tanto como pueda” finaliza.
Usted también puede hacer una diferencia por los niños de St. Jude